El estilo wu tradicional
MA JIANGBAO:
El Taijiquan estilo Wu apenas se conoce en España, pero es uno de los más practicados en el Sudeste Asiático, y en Europa cuenta con una sólida implantación. Ma Jiangbao es nieto de Wu Jianquan, el fundador del estilo, y desde finales de los años ochenta reside en Holanda, dedicado a su difusión en nuestro continente.
Usted es hijo del célebre Ma Yueliang y de Wu Yinghua, la
hija de Wu Jianquan, el creador del estilo Wu. Creo que muchos nos
preguntamos cómo debe haber sido el aprendizaje del Taiji con unos
padres así.
La mía ha sido una familia dedicada a las artes marciales desde hace
mucho tiempo, de manera que el Taijiquan siempre ha estado ahí, desde
que yo pueda recordar. Cuando era niño recuerdo que los miembros de mi
familia se entrenaban continuamente en nuestra casa. Y no sólo eran mis
padres, sino también mis hermanos y hermanas y otros miembros de la
familia, como mi tío Wu Gongyi. Desde muy pronto empecé a participar en
los entrenamientos como un juego. A los ocho años de edad terminé de
aprender la forma de mano vacía. Mis padres eran quienes se encargaban
de enseñarme, pero yo también practicaba mucho a solas. Con unos
dieciséis años terminé las formas de armas. Y el empuje de manos era
algo que siempre estaba presente. Principalmente me enseñaron mi padre y
mi madre, pero también aprendí mucho de mis dos hermanos. Al cumplir
los dieciocho años mis padres me propusieron que empezara a enseñar en
la Asociación de Taijiquan Jianquan de Shanghai.
Se
dice que el Taijiquan estilo Wu es en la actualidad el que más se
parece al estilo Yang original. ¿En qué se parece y en qué se
diferencia?
La familia Wu aprendió a lo largo de tres generaciones con la familia
Yang. Por eso al principio los dos estilos eran muy similares, pero
poco a poco empezaron a diferenciarse. Sin embargo las pautas de las
formas largas siguen siendo muy parecidas. Actualmente yo enseño las
formas tal y como Wu Jianquan las estandarizó. Nuestra tradición
familiar también es muy rica en técnicas de empuje de manos. De todos
modos existen algunas diferencias claras con el estilo Yang, como la
inclinación del cuerpo hacia delante en algunas posturas o la posición
paralela de los pies.
Para practicantes de otros estilos, estas características del
estilo Wu resultan difíciles de entender. ¿Puede explicarnos estas
peculiaridades y su razón de ser?
La inclinación hacia delante del cuerpo significa que el cuerpo debe
formar una línea recta desde el talón hasta la coronilla. Esta postura,
combinada con la colocación paralela de los pies es muy eficaz para
aplicar fuerza. De esta forma todas las partes del cuerpo, de los
talones a los hombros, están alineados en la dirección en la que se
aplica la fuerza.
La interacción de las caderas y la cintura en el estilo Wu es diferente a la de otros estilos. ¿Podría describírnosla?
Esto tiene que ver con lo que comentaba hace un momento. En el estilo
Wu los pies a menudo se mantienen paralelos. Si desde esta posición
giramos el cuerpo a partir de las caderas perderemos el equilibrio
central, o zhong ding. Por eso giramos el cuerpo desde la
cintura. Girando de esta forma, también es más fácil desviar un ataque y
hacer caer al contrario en el vacío sin perder nosotros el equilibrio
central.
En el estilo Wu la progresión que sigue el movimiento es
“mano, cintura, pies”. Esto parece ir en contra de los principios de la
mayoría de los estilos. ¿Puede explicarnos esta mecánica?
En efecto, en el estilo Wu la progresión del movimiento es “mano,
cintura, pies”, pero lo importante es que todo el cuerpo llega al final
del movimiento a la vez. Esta es la mejor forma de aplicar fuerza. Por
ejemplo, si el movimiento se inicia con el cuerpo, nuestro oponente lo
verá con facilidad y le será más fácil neutralizar el ataque de las
manos, que vendrán detrás. Como norma en el estilo Wu el movimiento lo
inician o lo “guían” una o las dos manos. El torso sigue a las manos, y a
través de la conexión de la cintura lo siguen las caderas, piernas y
pies.
Al decir que todo el cuerpo termina el movimiento a la vez queremos
decir que las manos llegan a su posición final exactamente al mismo
tiempo que termina el desplazamiento del centro de gravedad o el giro.
En el tuishou estilo Wu se practican ejercicios en solitario. ¿En qué se diferencian del trabajo de forma?
Los ejercicios de empuje de manos en solitario son los mismos que se
realizan con compañero. La razón de hacerlo así es que de este modo uno
puede concentrarse más fácilmente y ejecutar el ejercicio con precisión.
Así tenemos tiempo suficiente para concentrarnos por completo en los
movimientos. Al cabo de un tiempo, cuando uno ya realiza los ejercicios
correctamente, puede empezar a practicar con un compañero. Al ser ya
correctos nuestros movimientos, podemos concentrarnos en ajustarlos a
los de nuestro compañero.
La efectividad en tuishou de los expertos en estilo Wu es
unánimemente reconocida. ¿Cómo se enseña y se perfecciona el empuje de
manos en este estilo?
Primero hay que encontrar un buen profesor. Este es uno de los
principales problemas. Después hay que buscar buenos compañeros de
práctica, y que sean adecuados a nuestras necesidades. Al principio es
muy recomendable no practicar con demasiados compañeros diferentes. Así
resulta más fácil acostumbrarse al otro y ejercitar nuevas técnicas. En
esta fase se debe dar el máximo énfasis al entrenamiento de la habilidad
de escucha (ting jin). Si se practica así, con el tiempo se desarrolla naturalmente la capacidad de comprensión (dong jin).
Una vez que se ha alcanzado cierto nivel, hay que buscar la mayor
cantidad de compañeros posible. Así se potencian las habilidades
técnicas, el ting jin y el dong jin considerablemente.
En el estilo Wu, además de la forma lenta, la más conocida,
existe una forma rápida. ¿Puede hablarnos de ella? ¿Cómo complementa el
trabajo de la forma lenta?
En tiempos antiguos las formas eran bastante rápidas. A partir de la
década de 1920 el Taijiquan empezó a enseñarse públicamente, y entonces
muchas de las personas que querían aprender Taijiquan no estaban
familiarizadas con las artes marciales. Por eso los maestros de entonces
desarrollaron formas totalmente lentas para divulgar el Taijiquan.
Estas formas se popularizaron mucho, tanto que en la actualidad casi
todas las formas de Taijiquan son lentas.
En el estilo Wu hemos conservado la forma rápida antigua. La forma
lenta del estilo Wu procede de la forma rápida. Por eso siguen los
mismos patrones y la misma secuencia de movimientos. Esto significa que
cuando en determinado momento de la forma rápida se hace “Manos como
nubes”, en la forma lenta también se hace. Pero aunque el patrón del
movimiento es el mismo, los movimientos en sí no lo son. La forma lenta
no es simplemente la forma rápida ejecutada despacio. Por ejemplo, en la
forma lenta los saltos y los giros súbitos del cuerpo han desaparecido o
se han suavizado considerablemente.
El estilo Wu también incluye trabajo de espada, sable y
lanza. En el pasado su utilidad era evidente, ¿pero qué nos aporta en la
actualidad la práctica con armas?
No todos los aficionados al Taijiquan practican formas con armas,
pero hay tres razones de peso para hacerlo. Primero, el Taijiquan es un
arte marcial tradicional. En China las artes marciales tradicionales
siempre han incluido formas con armas. El Taijiquan, como parte de esta
tradición, ofrece al practicante varios tipos de formas de armas. Si uno
está interesado en seguir la tradición y en aprender un sistema
completo, las formas con armas son una parte importante.
En segundo lugar, las formas con armas se entrenan dinámicamente.
Esto quiere decir que hay alternancia entre movimientos rápidos y
lentos, duros y suaves. Este tipo de práctica contribuye al desarrollo
físico del practicante y exige un alto nivel de habilidad y control del
cuerpo. Por eso las formas con armas son un complemento ideal de las
formas lentas.
Y en tercer lugar, la actividad atlética y el trabajo físico intenso y
exigente potencian los efectos del Taijiquan sobre la salud. Y dado que
las formas de armas se practican en solitario, se puede ajustar sus
exigencias a la constitución y la forma física de cada uno.
¿Cómo se trabaja la respiración en el estilo Wu?
Una respiración adecuada es muy importante. El aspecto más importante de la respiración es la naturalidad (zi ran).
Al ejecutar una forma se debe respirar como se respira siempre. No se
debe intentar conectar artificialmente la respiración con los
movimientos. Ese no es el camino. Es exactamente al revés. Si los
movimientos son ligeros y no hay estancamientos, la respiración se
volverá naturalmente profunda y lenta. Pero si las posturas son
incorrectas, por ejemplo, si los hombros o los codos se levantan, esto
influirá de forma negativa en la respiración. Si hablamos de postura
corporal, es muy importante mantener la cabeza erguida y el cuello
“vacío”, hundir los hombros, relajar los codos, alinear la columna y
relajar la cintura. Si nos concentramos en una postura corporal correcta
y los movimientos son ligeros y fluidos, la respiración será profunda y
armoniosa. Si trabajamos de este modo, después de practicar la forma
nos sentiremos relajados y descansados.
¿Cuál es su consejo para los que quieren profundizar en el arte del Taijiquan?
Además de tener un buen profesor y un grupo armónico con el que
practicar, se deben trabajar las cinco cualidades que recomendaba mi
padre:
- Calma (jing). Lo que llamamos “calma” tiene tres aspectos. Hay que alcanzar un alto grado de concentración, y los centros nerviosos deben estar alerta. La respiración debe ser regular y el qi hundirse en el Dantian. Esto es lo que se denomina “el cuerpo en calma”. Los movimientos tienen que ser ligeros, ágiles y fluidos, sin rupturas. Eso es lo que se llama “el corazón en calma”. Tanto el cuerpo como la mente deben estar relajados. Es lo que llamamos “el espíritu en calma”. La Canción de los trece movimientos básicos dice: “En la calma se encuentra el movimiento. En el movimiento se encuentra la calma [...] El elemento sorpresa se consigue conectando con el adversario”.
- Suavidad (qing). Esta idea no significa que no se deba utilizar fuerza en ningún momento al practicar Taijiquan. La suavidad debe estar presente en todo el cuerpo, pero qing también implica agilidad y flexibilidad. Significa que no se utiliza la fuerza, pero se puede aplicar en cualquier momento. Y tampoco se debe confundir con la laxitud, que conduce al “doble peso”.
- Lentitud (man). La lentitud implica la fluidez y la continuidad en el movimiento, y para ello se debe trabajar pausada y metódicamente siguiendo los principios. Todos los movimientos deben ser precisos y perfectos.
- Consciencia (qie). Este concepto presenta dos aspectos. Primero, todos nuestros movimientos se deben ejecutar con plena consciencia; y segundo, uno tiene que ser constante y serio en el entrenamiento y esforzarse al máximo en cada movimiento. La consciencia implica estudio y atención constantes.
- Perseverancia (heng). Ante todo esto significa constancia. Haga frío o calor, se debe practicar regularmente. Es un proceso que pone a prueba la fuerza de voluntad y el carácter del practicante. Además, se debe alcanzar cierta cualidad de intensidad. El que sigue la máxima de que “una voluntad de hierro puede aguzar una mano de mortero hasta convertirla en una aguja” puede llegar a comprender la verdadera esencia del Taijiquan.
Estos cinco principios están estrechamente relacionados entre sí, y
no se puede descuidar ninguno de ellos. Siguiéndolos, uno puede llegar
lejos en el camino del Taijiquan. Pero además es importante profundizar
en los aspectos teóricos. Para eso se puede estudiar los clásicos o
libros más modernos, pero es conveniente tener sentido crítico al elegir
los libros, ya que algunos no son muy rigurosos.
Esta entrevista se ha podido realizar gracias a la colaboración de
Gerardo López, Martin Bödicker y la European Association for Traditional
Wu Tai Chi Chuan.
www.wu-taichi.com
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